Follow Us @soratemplates

domingo, 26 de agosto de 2018

El punto.



Aquella tarde, todos los signos de puntuación habían sido invitados a una fiesta, donde se reunirían como en aquellos viejos tiempos en las que se la pasaban felices entre hojas de papel y sus amigas las letras.
Las Comillas, y su prima la Coma, llegaron primero al punto de encuentro, seguida a ellas, el Paréntesis vino junto a su amigo el Corchete, Exclamación llegó un par de minutos después de ellos, y no tardaron mucho en aparecer los demás signos. Aunque claro, el Punto fue el último en presentarse, lo cual no extrañaba a nadie, pues como saben, el punto es el que termina todo (punto final). Entre platicas y bromas, un par de bebidas y comida, comenzaron a tener una buena fiesta, sin embargo, quizá se pasaron un poco con las caguamas y cubatas que consumieron, y así terminaron alcanzando el punto en el que ya mayoría de los signos estaban ebrios, y los que no lo estaban, no tardaban en estarlo gracias a la gran influencia de los otros y su poca voluntad.
Mientras Coma hablaba con Punto, terminó tocando una fibra sensible en él, logrando que este comenzara a llorar. Algunos lo sabían, otros no, pero Punto era de esa de borrachos que lloraba por todo mientras estaba ebrio, sin embargo, esta vez quizás si tenía una razón coherente por la cual lloraría. 
“¿Qué pasó?” Preguntó la coma mientras se mostraba angustiada por su compañero, con el cual de vez en cuando hacía equipo.
“La gente ya no me recuerda, cuando usan sus celulares, prefieren poner emojis para separar sus enunciados en un párrafo en lugar de usarme a mí. ¡Que para eso sirvo! y de allí me conocen como punto y seguido.” Reclamó el punto mientras se empinaba lo ultimo de su bebida, derramando descuidadamente un poco de esta sobre su ropa.
“No eres el único que sufre de esto, apenas y aparecemos en los mensajes de texto. Mira el lado bueno, algunas veces te usan cuando están enojados.” Contestó Coma, encogiéndose de hombros e intentando animar con esas palabras a su buen amigo el Punto.
“Y en los dictados, cuando terminan un párrafo y tienen que seguir con otro en el mismo texto se olvidan de ponerme. Entonces ¿Por qué razón me dicen punto y aparte? Si ya no hay punto, sólo es aparte.” Inflando sus mofletes y con sus ojos llenos de lágrimas, Punto claramente estaba haciendo un berrinche.
La noche avanzó y Coma siguió tratando de animar a Punto, pero desgraciadamente no lo consiguió, en esos momentos era imposible contentar a su compañero. Con el paso de unas horas, y después de haber llorado a mares, Punto se quedó dormido, y al siguiente día no recordaba nada de la noche anterior, lo cual agradezco, pues supongo que nuestro querido signo se podría sentir un poco avergonzado tras la escena que montó.

https://bit.ly/2xaz7AN

Ejemplos de punto y seguido
: Hay muchas cosas que invariablemente se mejoran con los años, pero los libros son una de las excepciones. Al contrario de lo que muchos....
Ejemplos de punto y aparte: Todo ensayo filosófico atiende, pues, dos instancias: lo que las cosas son y lo que se ha pensado sobre ellas. Esta colaboración de las meditaciones precedentes le sirve, cuando menos, para evitar todo error ya cometido y da a la sucesión de los sistemas un carácter progresivo.
Ahora bien: el pensamiento...
Ejemplos de punto final:
Ya es historia.

viernes, 24 de agosto de 2018

Greguería #1


La L es la I que se cansó, y se sentó.
- Atte: El conejo lunar

Primera parte: El canario rojo.

El canario rojo.

https://bit.ly/2CSMGdl
Un día como cualquier otro, un canario de color rojo se encontraba revoloteando entre árbol y árbol, el pequeño animal presumía de un plumaje hermoso, brillante, y abundante. Las personas que le veían pasar se quedaban maravillados por tal apariencia, de hecho, algunos anhelaban poseer a tal pajarito, y no tardó mucho en aparecer aquel hombre que le quitaría la libertad de la que tanto gustaba nuestro pequeño amigo emplumado.
Noah, ese era su nombre, de aproximadamente 28 años, alto, delgado, de piel bronceada, con nariz aguileña, labios delgados, y con un par de cejas que parecían azotares. Recientemente se volvió viudo gracias a un accidente de auto, fruto de su matrimonio, contaba con una hija cuyo nombre correspondía a Vania, dentro de poco cumpliría 7 años. En realidad, Noah era un hombre de buen corazón, nadie te negaría eso, hasta muchos podrían aportar anécdotas para colaborar esto. No era malo, pero quizás… estaba ciego, no pensó bien lo que estaba haciendo.
Cuando observó al canario rojo, se le ocurrió la magnífica idea de capturarlo para entregárselo como regalo de cumpleaños a su niña “¡Una mascota! ¡Claro! Eso es lo que necesita mi pequeña para animarse… ¿Y qué es mejor que un pájaro tan hermoso?” Pensó. ¿animarla por qué? Bueno, como ya mencioné, la madre de la niña había muerto en un accidente de tráfico muy reciente, lo cual tenía perdidamente desconsolada a Vania, cada que se que acordaba de ella, sus lágrimas resbalan por sus rechonchas mejillas, sus ojos tan hermosos de color miel, terminaban opacados por el rojo, y para Noah, no había nada más doloroso que ver a su pequeña sufrir noche tras noche. Decidido, compró una red, y esperó al canario rojo.
El pájaro, volaba como si le persiguieran, era rápido, ágil, y denotaba cierta elegancia con su movimiento, en realidad, nada lo perseguía, pero este gustaba de deslizarse de tal manera que daba esa impresión. Mientras aleteaba con euforia, cantaba de una forma espectacular, sin embargo, su canto fue interrumpido de un momento a otro. Cuando cruzaba por una arboleda, un objeto desconocido para él se posicionó ante sus ojos, iba tan rápido y le tomó tan desprevenido que no pudo hacer nada más que estrellarse en contra del objeto, cayendo en el mismo, era la red de Noah. El hombre, incrédulo por lo que había logrado, le dio una pequeña vuelta a la red para evitar que el canario pudiera escapar, lo apreció por un par de segundos. Mientras que Noah miraba a el pájaro con ojos llenos de fascinación, los ojos del canario no mostraban nada más que confusión, y terror “¿Qué carajos le pasa a este humano? ¿¡Por qué me hace esto!?” era lo que pensaba nuestro amigo emplumado. Al mismo tiempo en que el canario temblaba, Noah pensaba en lo feliz que el animalito podría hacer a su hija, con aire triunfante, se retiró hacia su casa.

domingo, 19 de agosto de 2018

Pensamientos de un conejo a media noche.


Inevitablemente, una vez más me encuentro trasnochando con la preocupación de no haber hecho una de mis tareas. ¿Y eso por qué? Bueno, para algunos les podrá ser curiosa y hasta extraña la razón por la cuál me encuentro así, otros se podrán sentir completamente identificados con lo que les hablaré, pues es obvio que no seré la única que se llegue a sentir de esta forma. De seguro es que todos hemos experimentado esta sensación, aunque sea una vez en la vida; Al momento en que un profesor, o alguien más te pide hacer algo que te gusta… Te bloqueas.
https://bit.ly/2Mmzq5c
Hacer una entrada para mi blog se escuchó fácil al inicio, de hecho, pensé varias ideas para realizar la publicación, como el crear un par de críticas sobre animes que ya vi, mangas que terminé, películas que me gustan, algún relato mío, o siquiera comentar alguno de los pocos libros que he conocido, (es curioso que conozca pocos teniendo en cuenta que estudio una licenciatura en lenguas y literatura hispanas, pero este tema quizás lo tocaré a profundidad en otra ocasión) pero al momento de sentarme frente a la computadora con el afán de escribir lo que deseaba… Bueno, desgraciadamente terminé por darme cuenta de que en cada uno de los temas, no me sentía satisfecha. “¡Quiero hacer algo mejor!” Pensaba, mientras borraba cada uno de los borradores que ya estaban a la mitad, es posible que me esté exigiendo más de lo que pueda dar, pero si voy a hacer algo ¿por qué motivo no lo haría bien? Hacerlo bien hasta el punto donde vea lo que hice y diga “de verdad que me gustó”. Sentía, que, al pensar en los temas, en lo que iba a decir, y en cómo lo haría, me facilitaría la parte más complicada, pero al escribir, terminé por notar que las ideas que en esos momentos sostenía, se escapaban de mis manos, manteniendo retenidas menos de la mitad.
Si ven algo por aquí, de seguro es que me agradó el resultado final, o simplemente me pidieron subirlo y no tenía las ganas suficientes como para editar lo que mencioné y hacerlo más presentable. Pues no es un secreto que la pereza es mi acompañante número uno del día a día, eso no lo podré negar, de hecho, de alguna manera tenía el presentimiento de que terminaría haciendo las cosas al final, por algo el título de mi blog: “el conejo rezagado”.
Muchas veces puedo tener ideas por montones, pero al momento de querer atrapar a alguna de estas ideas, se esfuman como si nunca antes hubieran estado allí, o muestran que no fueron tan buenas ideas como creí que lo serían. Supongo que un ejemplo que podría poner es cuando te dan un helado, y puedes colocar a gusto lo que quieres que tenga el helado; Algunas veces el sabor te fascinará, y en otras ocasiones te preguntarás el por qué terminaste por colocarle tantas chuches al mismo, y finalizarás quitando algunas golosinas o comerás con desagrado al pobre helado.
No tengo mucho más que decir, de hecho, hasta creo que metí relleno de más. Pero me gusta escribir, además de que me tranquiliza, me ayuda a hacer una tarea a la cual iba a abandonar por falta de ideas. ¡Dos pájaros de un tiro!

Muchas gracias por leerme mis conejos. Sus visualizaciones y cariñosos comentarios que algunos me realizaron en persona me animaron mucho, así que les agradezco por sus tan tiernos cumplidos ♥.

lunes, 13 de agosto de 2018

Presentación - El conejo lunar de humanidades.


El conejo lunar de humanidades.

Un... ¿Conejo lunar?

Quizás la razón por la cual te encuentras leyendo esto es por el título, digo, yo estaría aquí por esa misma razón. Pero bueno, la verdad es que se trata de nada más que una de sus compañeras de clase, una simple estudiante de la carrera de lenguas y literaturas hispanas de la UAEMéx.
Mi nombre es Grettel Aurora Herding Arce, y el propósito de mi título (además de llamar la atención) es el expresar que siempre me encuentro perdida en mis pensamientos, adoro estar en las nubes, soy de esas personas que parecen estar en todos lados, pero a la vez en ninguno. La noche siempre ha sido la parte del día donde más activa puedo estar, para mí, la noche es mi día. Y la parte del conejo… bueno, muchos sabemos que hay un conejo en la luna (no literalmente, no me quieran linchar después).
https://bit.ly/2MHBMaO
Lo mío no es tanto el describirme, pues sin lugar a duda siento que soy un fracaso haciendo eso. Bueno, en realidad siento que soy un fracaso en muchas cosas, hasta para quererme, lo cual demuestra mi falta de autoestima y el hecho de que soy sumamente negativa. Este rasgo de mi personalidad es algo que trato de cambiar, aunque vamos, los cambios son difíciles, y más cuando se trata de alguien como yo que tiene tan poca constancia.
Supongo que soy una chica normal, con costumbres un tanto raras que no me atreveré a decir para evitar que me vean mal, lo cual, tampoco me importaría, pero no quiero ni tengo ganas de explicar mis gustos raros. Lo que mencionaré no pasará la línea de lo excéntrico, y se mantendrá en lo que muchos consideran “normal” así que no esperen menciones inusuales, y ya si quieren conocer más de mi persona, bueno, eso queda entre sus manos:

Zanahorias.

Una de las cosas de las que más disfruto es el imaginar, y escribir, pero como todos, desgraciadamente cuento con algunos bloqueos creativos y falta de experiencia, así que a pesar de que esté deseando con todas mis fuerzas el escribir, no sabré cómo hacerlo para que me sienta realmente satisfecha. Algunos ya consideran esto como algo raro, pero desde que era pequeña, esto siempre fue mu6y normal para mí, y me refiero al gusto que tengo por animes y mangas. Desde pequeña, mi tío y mi madre nos enseñaron series como Evangelion, Inuyasha, Mew Mew Power, Samurai X, Kenichi, y demás, así que crecí viendo canales donde emitían algunos animes con temáticas infantiles y algunos que no tanto. Actualmente uno de los animes a los cuales les tengo más cariño es el de Your lie in april, no acostumbro ver animes con temática de romance, pero de alguna o de otra manera, termino disfrutando mucho de los mismos. Siento que el romance que algunas series asiáticas terminan plasmando es más infantil y tierno, así que termino ablandándome al ver ésas cosas. Gracias a mi gusto por el manga y anime, las costumbres japonesas siempre llamaron mi atención, así que con el tiempo fui investigando más sobre su cultura, terminando realmente interesada en un país que se encuentra en el otro lado del mundo. Regularmente, adoro a los animales, y mi animal favorito es el zorro. Siempre he sentido que es… simplemente hermoso, cuenta con movimientos que a mi parecer son tan elegantes, emite sonidos tan peculiares, tienen unos ojos fantásticos, y una cola tan esponjada que despierta mis ganas por querer tener alguno. Cuando fui conociendo un poco más la cultura japonesa, me di cuenta de que había un ser fantástico llamado “kitsune” el cual, como algunos podrán saber, el kitsune es el espíritu protector de los bosques, este mismo cuenta con la apariencia de un zorro, y también por este motivo, el zorro se convirtió en uno de mis animales favoritos. Supongo que aún quedan muchas cosas por explicar, pero ¡no tengo tiempo!
Mi banda favorita, hasta la actualidad, es la de Paramore, sin embargo, mis gustos han variado con cada mes, así que ahora… bueno, he escuchado mucho a Jósean Log, Carlos Sadness, y demás.


En cuanto hablamos de mi personalidad, bueno… Quizás es un poco complicada, ni siquiera yo me entiendo. Puedo ser volátil, de un momento a otro, perder la razón de mi ser y comportarme como una imbécil, aunque mayoría del tiempo, suelo ser muy calmada, y también tímida, lo cual, también es algo que trato de cambiar, no me gusta ser así, pero no puedo evitarlo, trato de ser un poco más sociable, pero siempre termino por sentirme nerviosa y no me adapto con facilidad. Suelo ser bastante infantil en ciertos momentos, aunque también llego a ser el tipo de persona que se mantiene en silencio mayoría del día, pensando en realizar un genocidio en cuanto salga de clases (creo que es curioso el pensar que de verdad hay momentos en que quiero hacer eso) pero bueno, actualmente supongo que ni yo me comprendo, y hasta podríamos encasillarme en una de las clásicas chicas “básicas” o “únicas y diferentes” pero quizás, puede que me esté equivocando.

Cazadores.

Las cosas que me desagradan, bueno, son muchas, pero regularmente intento no prestarles atención… Cosa que nunca puedo lograr. El sonido en extremo me estresa en grandes cantidades, sentirme presionada, las mentiras, promesas falsas, no darme cuenta de mis errores, los gatos, el hembrismo, machismo, los niños, las muñecas de porcelana, mi torpeza en ciertas situaciones, mi tan mala memoria, las personas que juzgan a todos mientras que estos mismos son de lo peor, detesto vivir en Toluca, posiblemente es por el clima, o tal vez por mi familia y malas experiencias en el lugar, el punto es que actualmente aborrezco estar aquí.
Supongo que con algunas cosas puedo llegar a ser muy sensible, y por esta misma razón puedo reaccionar de maneras muy diferentes, con otras cosas, bueno, suelo reaccionar de una manera más tranquila o simplemente resignarme mientras maldigo a todo el mundo dentro de mi cabeza. No diré que soy una persona agradable, ni interesante, o que no haga una de las cosas que ya mencioné, al final del día, soy como cualquier otra persona, un poco hipócrita, y sin lugar a duda, extraña.
Eso es todo lo que logré describir de mi persona, como se puede notar, ni yo me comprendo al máximo.